Cuando llegamos a la estación, recuerdo que mi padre dijo: "mira ahí está el AVE". Ese tren que tanto salía en las noticias. Dicen que echarle fotos a los trenes es de frikis. Pues llamadme friki si queréis porque gasté más de medio carrete (si, carrete) echándole fotos a ese tren tan "chulo". Mis libretas se llenaban de dibujos del AVE, me encantaba y, además, era fácil de dibujar. Estaba deseando que llegara a Almería para poder montarme en él. Pero no sólo me ilusionaba a mi, mi padre también tenía muchísimas ganas.
Pasaron los años y uno madura (aunque otros no tanto). Y conforme maduras vas dándote cuenta de lo difícil que está siendo que llegue el AVE a Almería. En estos días me acorde de ese niño, que era yo, y que estaba lleno de ilusión. De cómo esa ilusión se fue difuminando. Algo de esperanza quedaba cuando empezaron las obras para el tren de alta velocidad en el levante almeriense. Pero con la noticia de que "Adif ha tapiado los túneles del AVE Almería-Murcia" ya no hay esperanza.
Tunel tapiado. |
Por eso, los niños de Almería se tendrán que conformar con los trenes de juguete. Que no son de alta velocidad, pero la imaginación hace mucho. Porque se ve que el AVE es verdaderamente un juguete. Juguete que utilizan los políticos para hacer campañas y ganar votos, mientras juegan con la ilusión de los almerienses que, como niños, también quieren trenes como sus vecinos de otras provincias.
Muy bueno! Totalmente de acuerdo en que el AVE no llegará a Almería en mucho tiempo (contando con que algún día llegue).
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